¿Y qué echaría yo de menos si me volviese a España y dejase Alemania? Es una duda que ha planteado Marta desde La Libreta Roja para escribir sobre ello en nuestros blogs.
Yo este verano ya estuve dando vueltas a este tema, porque estábamos pendientes de ver si le renovarían el contrato a mi marido. Incluso recopilé información sobre los trámites que hay que hacer si uno se va de Alemania. Ahora me he parado a pensar más sobre esto, para contaros las cosas que echaría de menos de Alemania si me fuese.
Tabla de contenidos
Cosas que echaría de menos de Alemania
A veces sí que pienso sobre que pasaría si al final nos tocase volvernos a España… Y reviso pros y contras.
Para mí sería duro, porque aunque integrarse no es fácil tampoco, en general me gusta la vida aquí. Por este motivo, realmente habría muchas cosas que echaría de menos de Alemania, y la lista es larga. Os cuento las 8 cosas más relevantes.
1 – El salmón
La variedad en el pescado fresco en Alemania brilla por su ausencia, al menos por aquí por Bremen. Aunque me han comentado que en otras ciudades es similar.
Aquí en muchos sitios encuentras salmón y poco más. Pero eso sí, el salmón está muy bueno, tanto el ahumado como el fresco. Ahora notamos la diferencia cuando vamos a España.
Según me contaron, se dice que en la segunda guerra mundial hasta el servicio se quejaba de comer básicamente salmón todos los días porque era de lo poco que podía llegar gracias a la cercanía con el puerto…
Alemania no brilla especialmente por su gastronomía, así que supongo que es la única comida que echaría de menos.
https://www.instagram.com/p/BZve__rlrCr/?taken-by=lasaventurasdetaisa
2 – Flexibilidad de horarios
Esto sé que ha sido algo de nuestra situación particular, y que igual no siempre es así. Aunque sí que es más habitual que en España.
En nuestro caso, tanto mi marido, como obviamente también yo, tenemos horario flexible. Esto nos permite organizarnos y conciliar estupendamente, aún sin ayuda familiar. E incluso la hora de entrada a la guardería es flexible, con lo cual nos evitamos prisas.
Hubo una temporada que incluso nos pudimos permitir dejar de programar el despertador.
3 – Ventajas de trabajo autónomo
Si dejase Alemania para irme a otro país de Europa, igual hasta podría llegar a ser mejor. Pero volver a España y seguir con el estilo de vida que llevo ahora sería muy complicado.
Ser Autónomo en Alemania, para ingresos de bajos a moderados, es bastante sencillo y asequible. Y bueno, si llegase a ganar mucho más, podría permitirme todos los gastos sin problema. Veremos cuando los niños sean grandes.
Mientras tanto, me permite trabajar mientras estoy con mi niña, y tener más tiempo para estar con mi familia.
4 – El sistema educativo
No digo que sea perfecto, y tiene sus detractores. Pero a mí me gusta, al menos la etapa preescolar, en las guarderías.
Sin presión ni prisas. Ni para leer, ni escribir ni para dejar el pañal. Sólo aprender jugando (y vaya si aprenden). Y si no están preparados para empezar al colegio, no hay ningún drama en esperar un año.
5 – Tener un hijo en Alemania
No sé si nos decidiremos en un futuro a tener más hijos. Pero posiblemente, si me fuese a España, me lo pensaría muchísimo más y no lo haría. Si me quedase en Alemania creo que igual me acabaría animando, ya que no hay color en cómo llevan aquí los embarazos y partos.
Aquí me he sentido mucho más arropada, informada y respetada con el embarazo y parto, que cuando nació el mayor en España.
Y por no hablar de las diferencias en cuanto a subvenciones por tener niños (aunque la burocracia si que sea algo excesiva) y el permiso de maternidad.
6 – La oferta de actividades para los niños
Es una pasada la cantidad de actividades que hay para los niños. Aquí en Bremen, la cantidad de lugares y actvidades para ir con los niños no da para aburrirse.
Y sobre todo, actividades para hacer junto a los niños. No sólo extraescolares, donde es dejarlos y a otra cosa. Sino sobre todo de cara a los bebés y niños más pequeños, pues hay muchísimas opciones de actividades padres con hijos. Gimnasia, grupos de gateo, reuniones de madres o de familias, iniciación a la música…
Y también muchos lugares de juego en que poder ir y pasar un rato con tus hijos, pensados para acomodar tanto a los mayores como a los niños. Por ejemplo los museos, la biblioteca, el jardín botánico,
7 – Los Parques de juegos
A pesar de que la arena a veces sea un engorro, los niños disfrutan de lo lindo en ella.
El ambiente relajado en ellos es otra de las cosas que más me gustó desde el principio. Como también por las infraestructuras y originalidad.
Realmente, sí echaría mucho de menos los parques de Alemania.
8 – La naturaleza
Una cosa que no se me va a olvidar fue los comentarios desafortunados de un transportista. Cuando aún estábamos en España, buscando cómo hacer la mudanza. Una de las empresas a las que pedí presupuesto, cuando dije que venía a vivir a Bremen me dijo: «¿Allí? ¡Pero si es una de las ciudades más feas de Europa, toda gris y mucha humedad!» Bueno, pues humedad mucha, sí. Pero en el resto no tenía nada de razón. Obvio ni me molesté en contestar más (vaya forma de intentar ganar un cliente).
Teniendo niños es maravilloso poder contar con tanta vegetación y fauna. Hojas de miles de tipos y colores, todo el año. Plantas en cada calle. Encontrarte ardillas en el parque. Es mágico.
¿Qué opináis?
¿Y tú, qué echarías de menos?
Yo el salmón no lo echaría de menos con la de pescado que hay allí ?. Añadiría el transporte publico, una familoa de 6 sin coche en España es un caos total, aquí con transporte tenemos suficiente
En mi caso el salmón es mi pescado favorito 😀 (Por suerte). Y tienes razón, que el tema del transporte público también es una pasada. Aquí mucha gente prescinde del coche, en España es rarísimo que alguien no tenga coche, y más con familia.
Hola Taisa! Yo vivo en Münster y, por aquí, el pescado también brilla por su ausencia ? Es una de esas cosas a las que no termino de acostumbrarme, la verdad. Nos leemos! Un saludo! ?